“El Feedback es el desayuno de los campeones.” – Ken Blanchard
Cuando se aplica de manera efectiva, la retroalimentación o feedback es una forma de potenciar el conocimiento y las habilidades en nuestros colaboradores, de que desarrollen hábitos de reflexión y aumente su motivación para cambiar sus comportamientos, para bien o para mejor.
Lamentablemente, en muchos casos, las oportunidades que se presentan para dar feedback, no son aprovechadas o son ineficaces e incluso contraproducentes.
Desde mi experiencia de acompañar a diferentes Líderes y sus Equipos en sus procesos de desarrollo, son varias las razones por las que muchos no se sienten motivados a dar feedback a las personas con las que trabajan. Entre las frases más comunes que suelo escuchar, puedo mencionar las siguientes:
- “Es difícil de hacer”
- “No sé cómo decirle lo que pienso sin que se lo tome a mal”
- “La gente es demasiado emocional”
- “No tenemos tiempo para eso”
- “Pueden mal interpretar las cosas”
- “Si les dices algo que no les gusta se quedan resentidos”
La verdad es que detrás de estas frases y muchas veces excusas, se esconde la cara del miedo. Muchas veces el miedo al conflicto que puede generarse cuando confrontamos a otra persona por un comportamiento inadecuado, o el miedo a mostrarnos vulnerables cuando damos un sincero elogio o reconocimiento, hasta el miedo a cometer un error si decimos algo que no es correcto. Es entonces cuando se opta por cualquiera de estas dos opciones: Evitar dar el feedback o darlo de forma inadecuada.
Aquí comparto algunas sugerencias para vencer muchos de esos miedos que pueden presentarse y poder dar un feedback efectivo:
- Es importante que el proceso de dar feedback sea completamente explicado y consentido, y mejor aún, que los colaboradores puedan participar en el análisis de su propio desempeño, y también aprender a utilizar el mismo proceso. De esta manera evitamos reducir la motivación y la sensación incómoda de incompetencia.
- Dar información precisa sobre lo que nuestro colaborador ha hecho, en otras palabras, dar feedback sobre sus comportamientos, en lugar de solo limitarnos a elogiarlo o criticarlo. La información específica acerca de cómo nuestro colaborador está realizando una tarea es mucho más útil que la mera alabanza o, sobre todo, la crítica.
- Generar un espacio de autorreflexión, invitando a responder las siguientes preguntas: ¿Qué es exactamente lo que estás haciendo de forma efectiva? y ¿Qué podrías hacer de manera diferente?
- Orientar el feedback hacia los objetivos. La retroalimentación sobre el desempeño significa poco si no se entiende en relación con un objetivo final. Existen tres preguntas que el feedback puede ayudar a responder: “¿Hacia dónde vamos?”, es decir: ¿Cuál es nuestro objetivo?, “¿Cómo vamos?”, es decir: ¿Qué progresos se han logrado hacia nuestra meta?, y por último, “¿Y ahora?”, es decir: ¿Qué medidas podría tomarse para seguir avanzando?
- Utilizar el lenguaje adecuado. Dar feedback sobre los comportamientos y no sobre la identidad de la persona. Por poner un ejemplo: Es completamente diferente el impacto de decirle a alguien: “eres un tonto” a decirle: “haz hecho una tontería”. Evitar también los “deberías”, los “no” (no te olvides de llegar temprano…mejor sería: recuerda llegar temprano), reemplaza el “pero” por “y” (haz realizado un buen trabajo pero…mejor sería: haz realizado un buen trabajo y…).
- Prepararnos, estar en un estado mental y emocional adecuado para dar feedback. Para lograrlo, podemos utilizar técnicas de respiración y/o relajación, sobre todo cuando vamos a tener conversaciones que pudieran tener una connotación emocional difícil.
Recordemos que el beneficio más profundo y duradero de dar y recibir feedback es poder ayudar a las personas a ser mejores, a que desarrollen una mayor conciencia y responsabilidad de su propio aprendizaje. Tener acceso a esta información crea oportunidades increíbles de crecimiento…realmente es el mejor regalo que podemos dar y a la vez recibir.
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El Autor:
Luis Flores-Guerra es Consultor y Coach Ejecutivo y Organizacional. Ayuda a Gerentes y empresarios a desarrollar su Liderazgo, ser más efectivos y obtener resultados extraordinarios. Accede a su entrenamiento virtual gratuito: Coaching y Liderazgo: Las 3 Estrategias Clave para el Éxito Personal y Profesional dónde conocerás un simple sistema de 3 pasos para desarrollar tus habilidades y crecer como persona y profesional. Reserva tu espacio aquí.